Quizás alguna vez has escuchado que hace
muchos millones de años Marte tuvo una
atmósfera suficientemente densa y caliente como
para permitir la existencia de agua líquida en
su superficie. Sin embargo, hoy en día el
planeta rojo es frío, seco y con una atmósfera
muy tenue.
Se piensa que Marte perdió la mayor parte de su atmósfera después de haber perdido su campo magnético. Éste funcionaba como un escudo que lo protegía de fenómenos como -por ejemplo- el viento
solar, un gas muy caliente proveniente del Sol. Una vez que este campo se extinguió, el viento solar causó un aumento importante de la tasa de erosión de la atmósfera marciana.
Se sabe que cuando Marte interactúa con las estructuras del viento
solar, como las eyecciones de masa coronal
interplanetarias (EMCI), la erosión atmosférica aumenta
por más de un factor de diez. Estas estructuras se presentan mucho más durante los máximos solares, cuando suelen ser también más intensas y rápidas. Es como si estuvieras disfrutando de la brisa en la playa y de repente un huracán se llevara tu gorro y tu sombrilla.
El consenso general en la comunidad científica es que históricamente la mayor pérdida atmosférica de Marte ocurrió durante los períodos de alta actividad solar. Sin
embargo, usando los datos de la misión Mars
Express
(MEX), recientemente, un grupo de investigadores de México, Países Bajos, Reino
Unido y Francia, llevó a cabo un estudio de la interacción de Marte
con las estructuras en el viento solar ocurridas en noviembre del
2007. Ésta fue una época de una actividad solar más baja de los últimos 100 años. Ésta fue una época de una actividad solar más baja de los últimos 100 años. Las estructuras que interactuaron con el planeta rojo, presentaron, relativamente, bajos valores de campo magnético, densidad y velocidad. Los investigadores se sorprendieron al ver que estos eventos aumentaron el flujo de masa atmosférica hasta ocho veces, indicando que aún durante los mínimos solares, la pérdida atmosférica de Marte puede ser substancial. Este descubrimiento es una pieza más de un gran rompecabezas complejo que nos permite entender los efectos del viento solar en la evolución de las condiciones superficiales de los planetas del Sistema Solar.
¿Quieres ver el artículo científico
publicado?
Pulsa aquí
ALGUNAS NOTAS PARA ENTENDER MÁS:
La actividad de nuestro Sol aumenta y dismuye en períodos promedio de 22 años. Se dice que el Sol está “quieto” alrededor del mínimo solar. Alrededor del máximo solar, el ambiente que rodea al Sol se vuelve intenso y turbulento.